| Resumen |
los pastizales de Ítaca, las blancas islas del mar griego, encarnan en La Odisea un ambiente más sereno que el de la otra gran epopeya griega: La Ilíada. Y aunque en la Odisea la muerte está siempre presente, su espíritu es reposado y se manifiesta como sombras que pertenecen a un pasado glorioso y cruel, fruto de la lucha del hombre contra su destino. este es un viaje en el que abunda la aventura, es el largo y peligroso periplo en el que Odiseo se encuentra con los suyos y consigo mismo. |
