Resumen |
Dédalo, excelente escultor y arquitecto, construyó numerosas obras; una de ellas fue el laberinto , conjunto de corredores ensamblados de tal manera que, una vez dentro era imposible hallar la salida. Allí encerraron al Minotauro. Cuando Minos supo su deseo de partir de Creta, lo encerró junto con si hijo Ícaro en una torre. Dédalo, entonces con plumas de aves fabricó unas alas y así pudieron huir. Ícaro pereció en la travesía, pero Dédalo sobrevivió y continuó con sus inventos. |